1. Fase de evaluación
En esta fase se realiza una evaluación completa de la situación y se busca el origen de las dificultades y los factores o variables que mantienen el problema o síntoma. Para ello es de suma importancia la participación de la familia, el colegio y el entono habitual de los menores implicados.
2. Plan terapéutico
Una vez completada la fase anterior, se diseña la estrategia más indicada en función de la dificultad a tratar. Este plan es compartido por los profesionales tanto con la persona menor como con su familia.
El abordaje será individualizado y puede requerir sesiones individuales o en grupo, sesiones familiares, programas de intervención concretos, o la combinación de todas ellos. Cuando el plan terapéutico lo requiere, se incluye en él a miembros del centro escolar, así como de otras entidades o terceras personas relevantes en el desarrollo de la persona menor.
3. Seguimiento
En función del momento en que se halle la intervención se realiza una revisión del plan terapéutico pactado con la familia, redefiniendo objetivos.